Queridos amigos hoy toca pasta, para recuperarse de unas magníficas vacaciones que en los próximos días os contare, han sido muy interesantes en todos los sentidos y como no, desde el punto de vista culinario también.
La receta comienza con un sofrito de ajo, cebolla, pimiento rojo y verde, para mas tarde añadir el calamar y los mejillones sin la cascara. Estos previamente han sido cocidos y el caldo colado lo reservamos para mas tarde añadírselo con un vaso de vino blanco y otro de agua. Dejamos que todo se haga a fuego lento para ya al final añadir un poco de salsa de tomate, un poco de sal, pimienta y una cucharada pequeña de azúcar para rectificar la acidez del tomate.
Por otro lado hervimos el agua con un poco de sal y añadimos la pasta vigilando para que quede al dente. Y servimos después de enfriar la pasta y añadiéndole la salsa marinera que previamente habíamos preparado. No descartéis unas gotas de tabasco a la salsa para darle un toque picante muy rico y desde luego el caldo que os sobre de cocer los mejillones es fundamental. Yo personalmente los abro con vino blanco o con vermout blanco o con sidra, provad. A disfrutar!!!...