Queridos tod@s os presento otra receta que espero que de que hablar, un plato supersencillo en el que presentando todo en una bandeja de horno, este será el maestro de ceremonias para conseguir un plato cuanto menos singular.
En una bandeja ponemos un poco de aceite y limpiamos unos tomates duros que cortando la tapa superior vaciaremos cuidadosamente. Salpimentamos el interior y colocamos unos trozos de queso curado en el fondo. Más tarde realizaremos una bechamel con ajo, sal, pimienta, puerro y bacon crujiente que previamente habremos frito, situandolo todo en el interior del tomate.
Colocamos la tapa del tomate que hemos reservado y con la ayuda de un palillo la mantendremos. Lo meteremos todo en el horno a 150ºC durante 45 minutos, espolvoreando en los últimos 15 minutos una cucharada de azúcar moreno a cada tomate, dejando que caramelice y se derrita, creando así una capa crujiente y dulce. A la hora de comer el contraste dulce y salado será la tónica predominante y quizás como truco para que no suelte demasiada agua al relleno, pinchar un poco en los laterales del tomate para que la suelte.
Los rellenos en esta receta son casi infinitos, setas, unas anchoas, carne picada,... En fin, sin lugar a dudas la imaginación de cada uno es fundamental, que sumando el toque dulce al tomate provoca sin darnos cuenta que el relleno este envuelto en una mermelada con consistencia. Salud para todos.
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