sábado, 12 de febrero de 2011

Falsa hamburguesa estructurada

   Os presento un plato de nuevo sencillo y socorrido para cualquier cena, quizás el talón de Aquiles de muchos que tras una jornada de trabajo extensa nunca sabemos que hacer.



   La plancha es en esta ocasión el director de orquesta que de una manera saludable va a preparar los ingredientes para terminar montando un plato diferente y agradable al paladar.Se trata de una hamburguesa sin pan que salpimentaremos y pondremos en la plancha. Podéis jugar con la naturaleza de la hamburguesa pudiendo ser de pollo, de pavo o incluso de choco, esta última muy original y riquísima, además recomiendo que de nuevo vuestro carnicero de confianza os pique la carne que más os guste, añadiéndole un poco de cerdo que hace que la hamburguesa sea un poco más jugosa, incluso podéis macerar la carne con ajo, perejil y alguna hierba aromática que os guste, realizando todo 12 horas antes de ser consumida. Destaco ya en este momento que el adobo de las carnes 12 horas antes es fundamental, labor que aprendí de mis queridos abuelos, que se afanaban en momentos de festividad en preparar y aderezar la carne que se fuera a degustar.


   En la plancha se pone un poco de aceite, sal gorda o maldon y pimienta, seguramente se añade el bacon, cebolla en rodajas y pimiento rojo, intentar que se haga todo uniformemente y que incluso, en el caso de la cebolla, intentéis caramelizar . La sal además de potenciar el sabor desidrata por ósmosis el producto evaporizando el agua y haciéndose mucho antes.
Terminaremos el plato elaborando las capas a nuestro gusto e intercalando queso para fundir o de rulo de cabra, maravilloso para este plato. El chorrito de aceite higt-class no debe de faltar o incluso una vinagreta de mostaza y vinagre de módena con unas alcaparras suspendidas en el bálsamo.




Buen provecho a todos!!!.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Cachopo de pollo mancillado

   Queridos amig@s por fin bautizo este blog con mi primera receta, un plato fácil y en el que el horno, el pollo y una serie de verduras de base haran un plato para sorprender a cualquiera en una cena de sábado.



   Tan solo necesitáis dos pechugas de pollo abiertas en libro, labor que el carnecero de confianza hará gustosamente. En una fuente con dos cucharadas de aceite poneis una de las pechugas, salpimentaís y  se cubre con bacón o jamón de no demasiada calidad, tomate en rodajas, cebolla en juliana y pequeños trozos de queso azul o cabrales, sin abusar, ya que es un queso fuerte y predominaría demasiado en el relleno. Colocais la otra pechuga cubriendolo todo y con 4 o 5 palillos "coséis" ambas pechugas para evitar que se salga el relleno y que el pollo tienda a encoger demasiado todo el cachopo.




   Si lo deseais se puede espolvorear un poco de pan rallado para que genere una pequeña costra por encima del cachopo y le de un toque crujiente. Por otro lado realizaremos una guarnicion de verduras que acabaran formando una pequeña salsa que mas tarde añadiremos para que el plato no sea demasiado seco. Para ello picaremos y doraremos ajo, puerro, pimiento rojo y champiñones rehogado todo hasta que pierdan la vergúenza. Al final un chorrito de vino blanco e incluso un poco de nata para dar untuosidad y cremosidad a la salsa. Cuando se vea el cachopo dorado se añade la guarnición y toda la salsa que hemos elaborado.

Servir y emplatar con unas patatas panadera y desde luego buen provecho!...