jueves, 17 de febrero de 2011

Pisto sin pesto escalfado

   Os presento algo tan típico como un pisto de calabacín, queso y huevo escalfado, plato completo, fácil de hacer y un acompañamiento perfecto para pescados y carnes.





   Para comenzar la receta pondremos un poco de aceite en una cazuela, con unas laminas de ajo, media cebolla y bacon. Una vez que el aceite se haya perfumado con el ajo y el bacon ahumado, añadiremos dos tomates y el calabacin picados, champiñón, sal, pimienta, un chorro de vino blanco y dejaremos pochar todo a fuego lento intentando que todo el agua que suelten las verduras se evapore. Este hecho tardará 15 o 20 minutos así que paciencia.




   Terminado este proceso colocaremos encima de la cazuela queso rallado curado, que podría ser el típico que se tiene en la nevera y un par de huevos que poco a poco se irán fundiendo y cuajando con todo el pisto. Lo ideal es acompañar todo con unas patatas panadera bien fritas para añadir un toque crujiente al plato, sin esperar demasiado a que estas se ablanden.



   Otra receta ideal para degustar de una manera sencilla y fácil. Salud para todos y a disfrutad.

martes, 15 de febrero de 2011

Coliflor y montaña

   Queridos amigos empezábamos a necesitar un poco de verdura en nuestras vidas y hoy toca coliflor. Esta inflorescencia de forma redondeada tiene múltiples cualidades, quizás destaque su poder anticancerígeno y que hoy la disfrutaremos con una guarnición de setas muy reconocidas.


   Comenzaremos por limpiar la coliflor y la coceremos vigilando que quede al dente en agua con sal. Por otro lado en una sartén rehogamos unos ajos picados en láminas, junto con puerro picado, un poco de cebolla, chorizo semicurado en trozos y bacón. Con la sartén bien caliente añadiremos los champiñones y las pleurotus ostreatus para más tarde introducir un vaso de vino blanco y reducir. El sentido de que este la sartén muy caliente consiste en evitar que las setas liberen el agua y tiendan a cocerse, quedándose blandas y sin consistencia.


   En este plato debemos de cuidar la sal, ya que hemos utilizado productos con alto contenido en este potenciador, como es el caso del bacón o el chorizo. Una vez que hayamos preparado todo, en una cazuela con aceite freiremos unos ajos y una vez dorados añadiremos un poco de pimentón dulce o picante a gusto del consumidor.


   Tan solo nos quedara emplatar colocando la coliflor en primer lugar, rociaremos en este momento con el aceite y pimentón, para más tarde dar paso a las setas. Si lo consideráis podéis cocer un huevo con la coliflor para darle un toque de color y presencia al plato.




   Disfrutad en compañía y con un buen vino. ¡Salud!.

domingo, 13 de febrero de 2011

La crema de Pauli

   Nada más saludable que una crema, en este caso de calabaza, que junto a la patata, la zanahoria, el ajo y un poco de puerro harán las delicias de cualquiera.




   Tan solo necesitáis introducirlo todo en una olla, incluso rehogarlo todo un poco si queréis, añadirle sal y pimienta o cualquier otra hierba aromática que os guste. Podéis incluirle un quesito y un poco de nata liquida para aumentar la cremosidad. En cuanto haya terminado la cocción triturar y servir con unas gotas de aceite virgen extra por encima. No os defraudará y la demandareis tanto como mi mujer.

Carrilleras, tinto y algo más

   Os presento una carne tierna, melosa, untuosa y agradecida. Se trata de unas carrilleras de cerdo, una carne exquisita, que no vemos habitualmente en las cartas de muchos restaurantes y que sin embargo recomiendo consumir por ser fácil de digerir, sin sabores fuertes y que casi no necesita ser cortada, pura mantequilla.



    En la olla elaboraremos gran parte de la receta, rehoganto en un poco de aceite ajo y las carrilleras salpimentadas para así sellar la carne y mantener todos sus jugos. En el momento en que en el fondo de la olla descubramos algo de costra añadiremos las verduras, una cebolla, zanahoria, champiñon pequeño entero, puerro, pimiento rojo y unas alcaparras. Añadiremos también una hoja de laurel y lo recubrimos con vino tinto de buena calidad y un vaso de agua. Insisto en que el vino tinto cuanto mejor sea más se va impregnar la carne de todo su sabor y cuerpo, desde luego que recomiendo un buen Rioja, pero a gusto del consumidor.





   Como guarnición unas patatas fritas en dados o al vapor pueden ser el acompañamiento perfecto. Es muy posible que la salsa no os salga ligada, sobra decir que harina o pan rallado o una de las patatas que habéis cocido triturada será perfecto para engordar y espesar la salsa. Otra opción sería triturar todo dejando a un lado los champiñones, en mi caso prefiero ver todo lo que como.




   Ya veis una receta más para un domingo cualquiera, no olvidéis un buen vino tinto y a disfrutar.